Una peligrosa forma de llamar la atención sobre la injusticia
Los enfrentamientos entre el gobierno chileno y el pueblo mapuche han alcanzado una nueva dimensión con la huelga de hambre que han establecido al menos tres representantes de esa comunidad, en apoyo del encarcelado chamán mapuche Celestino Córdova, quien fuera uno de los cuatro condenados por el homicidio de un matrimonio de agricultores en 2013.
Grupos comuneros informaron a la agencia EFE durante una breve parada frente al Ministerio de Justicia, ubicado a pocos pasos del Palacio de La Moneda, sede del Ejecutivo; que los mapuches ya completan siete días en esta medida de fuerza. Los indígenas dijeron que esa decisión sobrevino por la negativa del Gobierno a dialogar para que Córdova pueda asistir a renovar su 'rewe', un rito espiritual que las autoridades ancestrales mapuches cumplen periódicamente y para el cual debería trasladarse a su comunidad.
Asimismo, los grupos comuneros denunciaron la violencia que se aplicó en un desalojo contra Córdova y varios asistentes a una ceremonia denominada 'wiñoy xipantu', la cual se realizaría en la cárcel de Temuco el pasado lunes 9 de julio, y que fue impedida por la Gendarmería (guardia de prisiones), lo cual es una violación de su derecho a practicar sus creencias religiosas. Denunciaron además que a Córdova lo mantienen incomunicado por ya casi un mes a pesar de su grave situación de salud, pues también se encuentra en huelga de hambre.
Detrás de esa represión están el racismo y el despojo, han denunciado estas comunidades. Este es un conflicto que se arrastra desde hace décadas en el sur de Chile, donde los mapuches reclaman territorios ancestrales, hoy en manos de empresas agrícolas o forestales que los ocupan con la anuencia gubernamental. Tales reclamos en los últimos años han derivado en episodios de violencia, donde se han visto afectadas ambas partes.
Uno de estos hechos es el asesinato de Werner Luchsinger y Vivianne Mackay, un matrimonio de agricultores que murió en la madrugada del 3 de enero de 2013 y del cual se acusa al machi Córdova junto a otros tres mapuches. De acuerdo con lo investigado, unos encapuchados atacaron con disparos y bombas incendiarias la casa de campo de este matrimonio, ubicada en la región de la Araucanía, a unos 650 kilómetros al sur de Santiago, y de esos hechos un tribunal halló culpable al chamán y los otros.
